- El momento que viviste junto a tu hermano en la exaltación fue de los más emocionantes que se han vivido. ¿Cómo recuerdas el día de la exaltación y ese momento?
El día de la exaltación
lo recuerdo como un día super importante y muy emotivo porque ves a
todas las niñas que están viéndote y apoyándote y encima mi
hermano que se puso a llorar, realmente lo de mi hermano era una
sorpresa, pero yo ya me lo olía porque mi madre no se dio cuenta que
yo si me percaté de que él estaba ensayando con Sandra y no querían
que me enterara. Entonces, el día de la exaltación antes de que nos
llamen, vamos al despacho de la alcaldesa y vemos como llaman a la
Corte, y la pobre, lo puso y le hicieron quitarlo, y ya el momento
que salí y vi a mi hermano llorando, me emocioné y tengo que darle
las gracias a Rita por dejarle que me diera un abrazo en ese momento,
que para mi era super especial.
- La familia debe ser un pilar fundamental en un reinado de FMIV. ¿Que significó para ti?
Mi familia significa
todo, como has dicho, es mi pilar fundamental, mi madre que me ayuda,
me quiere como nadie, ha estado en mi año apoyándome muy fuerte, la
que más, en compañía de mi padre, mi hermano, el pobrecillo, que
aunque lo dejamos apartado un poco ese año, se involucró en todo,
en lo que pudo, lo compaginó con sus estudios, realmente un año en
el que yo no estuve nada con él y supo llevarlo super bien.
- ¿Cómo compaginaste tus estudios con tus obligaciones de Fallera Mayor Infantil de Valencia?
Yo estudiaba en el coche,
me preguntaba Sandra o me preguntaban los Vices o el chofer, luego
llegaba a mi casa y preguntaba si tenía algo de deberes o lo que
habían hecho, como por ejemplo el mes de Marzo, que como
comprenderás, no pude preguntar nada y luego cuando llegué a clase
pues era en plan: “Menos mal que habéis empezado tema, porque sino
me muero”
- Sandra Muñoz es tu Fallera Mayor, ¿Cómo fue y es actualmente vuestra relación?
Es como una hermana o más
que una hermana, ese año formas unos lazos con tu Fallera Mayor
impresionantes, ella forma parte de mi familia, ella y toda su
familia, sus padres, sus hermanas, su hija y la verdad que la
relación con ella es estupenda. Cuando podemos quedamos, es en plan:
“¿Cuando nos vemos? ¡Tenemos que quedar ya!”
- ¿Y con tu Corte de Honor?
En mi Corte he conseguido
grandes amigas y nos llevamos todas super bien.
Imaginamos que tendrás muchas anécdotas, ¿Nos cuentas alguna?
En ese año se viven un
montón de anécdotas, pero yo me acuerdo un día que no me acuerdo
que le pasó a la peluquera que me tuvo que peinar mi madre y ella y
las peinetas laterales no se llevan bien, menos mal que llevaba
mantilla y no se notaba que se le olvidaron. Y luego otra, el día que
nos hicimos las fotos oficiales que fue el día después de la exaltación, imaginarte lo cansadas que estábamos, tuve que dormir
con los tres moños y al día siguiente me levanté con la cara super
hinchada que tenía hasta fiebre, total que llegamos allí y yo imagínate como estaba que no me podían hacer las fotos, me decían:
“Abre más los ojos” y yo: “¡Pero es que no puedo!” y nos
tocó volver otro día, y luego es que cuando me tomaba vitaminas, se
me hinchaba la cara.
- ¿Tenias claro el color de tu espolín oficial o te costó decidirte?
Para nada, lo tenía
super claro, antes de que llegara el día, ya sabía de que color iba
a ser y si no estaba, pues tenía una segunda opción, pero para mi,
ese era desde el principio.
- ¿El acto que recuerdes con más cariño o emoción de todo tu reinado?
Fue la Crida, ver a todos
los valencianos allí abajo y cuando Sandra dice: ¡Ja estem en
Falles! Es una sensación de madre mía, tengo que el privilegio de
estar aquí arriba viendo todo esto, viendo todo el puente lleno de
valencianos y falleros, para mi eso fue impresionante. Me hubiera
encantado decir unas palabras, aunque solo hubiera sido: ¡Xiquets i
xiquetes ja estem en Falles!
- ¿Cómo viviste el día de la llamada y el momento en que el telefóno sonó en tu casa?
Yo estaba con mi familia,
por parte de mi madre, porque mis abuelos por parte de mi padre no
pudieron venir. Estábamos todos sentados en el sillón, me acuerdo
como si fuera ahora, estábamos mi hermano, mi padre, mi madre y yo y
en otro sillón mis tías y mis abuelos y mi tía tuvo la sangre fría,
por suerte, de grabarlo. Entonces, me acuerdo que estábamos viendo la
tele y no se si fue cinco o diez minutos antes, llama una amiga de mi
abuela y dice: “¡Hola!” y mi madre: “¿Quien eres?, ¡Cuelga
ya por favor!” y cuando sonó el teléfono nos pusimos todos a
llorar, mi hermano saltaba de alegría y mi padres, todos. Y de repente, suena el timbre y se te llena la casa de gente, a mi padres
le dijeron que no abrieran hasta que no le dijeran que eran los de
Junta, total que empezaron a llamar al timbre y mi hermano: “¡Que
no puedo abrir, que no sois los de Junta!” Así como diez minutos
llamando, hasta que le dijeron: “¡Que somos los de Junta!” y
entonces mi hermano abrió y de repente se te llena la casa de gente
y el delegado de Medios de comunicación te reorganiza la casa como
quiere.
- ¿Es dificil ser Fallera Mayor Infantil de Valencia? ¿Con que te quedas después de haber vivido un año tan mágico?
Yo creo que no es difícil si realmente lo vives porque no te das cuenta de si es difícil o no,
te das cuenta de que ha pasado un año y que no va a volver a pasar
en tu vida, realmente, es un año que es como un abrir y cerra de
ojos y me quedo con que he conocido a muchísima gente y que de
verdad, ha valido la pena porque he conseguido muchos amigos y he
conseguido hacer grande mi familia.
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